Se disputó el partido del pasado sábado con muchos elementos en contra que fueron insuperables.
Con la enfermería sin vaciar, sin portero, el horario del partido hizo madrugar a toda la expedición a unas horas poco recomendables para disputar un partido de fútbol en las mejores condiciones.
Eduardo sólo disponía de doce jugadores para plantear el encuentro, que quedarían en once para la segunda mitad. Como se había trabajado en los entrenamientos, esta circunstancia motivó el cambio de planteamiento habitual del míster. Con un planteamiento valiente comenzamos el partido con una defensa de tres y con la idea de presionar arriba la salida del balón del equipo contrario. El equipo llevaba la iniciativa del juego pero la presión se ejecutaba de un modo demasiado individual. Jugando hasta con el sol en contra cegando a los jugadores, les costó entrar en el partido llegando en una contra el primer gol contrario.
Ante este nuevo contratiempo los chicos derrocharon coraje y entrega, que posteriormente les pasó factura, físicamente hablando. Con alguna ocasión clara fallida para haber logrado el empate llegó el descanso.
Volvió el equipo al campo con todas las ganas de dar la vuelta al marcador, logrando el empate en las botas de David con un gran gol.
A partir de ese momento los chicos siguieron luchando, vaciándose en el campo y enfrentándose a nuevos contratiempos que el juego traía en forma de golpes y lesiones de varios jugadores.
Con los chicos extenuados por el esfuerzo, el equipo rival gestionó los cambios metiendo jugadores frescos en el campo. Así cuando parecía que al menos un punto viajaría de vuelta para Colmenar, la suerte no estuvo de nuestra parte recibiendo sendos goles en los dos últimos minutos del encuentro.
De este modo la derrota aún es más dura pero es sólo una derrota, la primera de la temporada.
Hay que seguir trabajando, no pasa nada, la suerte se nos acabará poniendo de cara siempre y cuando sigamos trabajando duro y como un equipo. A partir del lunes todos con la cabeza alta a entrenar duro y a seguir luchando contra las adversidades. Seguro que la enfermería se irá vaciando e iremos conjuntando el grupo y sacando lo mejor de cada uno de estos chavales.
Es otro de los aspectos que han de tener los grandes equipos y el nuestro lo es, aprender de las contrariedades y hacerlas frente aunque estas parezcan insuperables.
ANIMO CHAVALES A SEGUIR TRABAJANDO.
Un cordial saludo a todos los jugadores, entrenadores y familias de este Infantil B.
