Una mañana primaveral nos acompañaba este sábado en el Campo de Fútbol de Lorenzo Rico y las gradas se empezaban a poblar con las familias de los jugadores de la categoría infantil. El partido enfrentaba a la Agrupa y la Escuela Breogan. Fin de la primera vuelta. Ha pasado peligrosamente rápido.
Existe diferencia en la tabla entre ambos equipos, pero esta liga nos recuerda muchas veces que cualquier equipo te puede ganar.
Veníamos de cosechar una emocionante y apasionada derrota la semana anterior y siempre que se pierde pueden aparecer las dudas.
Nuestros pequeños comenzaron el partido con la iniciativa que a menudo presentan en el campo. En defensa nos mostrábamos muy solventes y los Gala, Rafa, Iván y Angel no nos hicieron muchos apuros, tan sólo un intento de “frivolite” de Marcos al borde del área hizo que Celia tuviera que presentarse ante el público asistente. En la parte ofensiva nos costaba mucho trenzar jugadas y darle continuidad y vivíamos de los balones desplazados a Pablo y Gonzalo que se mostraron muy activos durante el tiempo que estuvieron en el campo. Sin acciones de mucha transcendencia, y al filo del minuto 15, Mario es capaz de entrar en el área y tras varios regates culmina en gol el remate a puerta. El gol, pone un poco en órbita a un equipo, que trabajando como siempre no sacaba el lustre acostumbrado. (Que mal acostumbrados nos tienen, pero recordemos que son niños y que tenemos que ayudarles a que se permitan equivocarse).
Mostraban ganas por mejorar, no se les mostraba con la claridad de siempre y Torres y Guzmán intentaban avanzar por bandas para profundizar el ataque. Comenzamos a descubrir las armas, lanzamos un balón en profundidad a Pablo y éste, en un abrir y cerrar de ojos, se planta delante del portero, lo regatea y se marcha tranquilo hasta la línea de gol y remacha en la misma línea. Acabamos de encontrar la manera más sencilla y efectiva de hacer daño al contrario.
No podemos destacar ninguna jugada en especial, salvo la superioridad que nuestro alevín mostraba en el campo. No es poco, ¿no?.
En la segunda parte aparecen en escena, Iker, Guti y Angel (Portero). El guion no encuentra variación, se acentúa más la diferencia si cabe y las ocasiones de gol se ponen de manifiesto. El equipo robaba más balones en la línea de construcción contraria y facilitaba mucho el contraataque, arma letal en este partido. En uno de estos robos, Mario consigue conectar con Pablo. Éste pone tierra de por medio y ante la salida del portero le bate por alto. 3-0. Más de lo mismo y poco después, Marcos recibe en el centro del campo, sale de dos regates y envía en profundidad a Mario, se marcha hacia portera e “incomprensiblemente” y desde fuera del área lanza una vaselina que hace imposible la estirada del buen portero visitante. Una muestra más de la solvencia del equipo. Para entonces, Casasus y David, ya habían entrado al campo y seguían ofreciendo una muy buena línea de intensidad. Quedaba la última conexión rubia, y Mario consigue conectar con Pablo que cierra su cuenta con un bonito tercer gol. 5-0.
No fue un partido con mucha historia, no fue un partido que sea recordado por grandes acciones o por lo emocionante que fue, pero creo importante resaltar la solvencia demostrada por todo el equipo, cero ocasiones cedidas al contrario y 5 goles marcados.
Ahora que lo pienso, ¿Cómo puedo decir que no fue un partido con historia?.
Lo tengo claro, nos tienen muy mal acostumbrados.
Fin de la primera parte… Balance: Muy positivo… Deseo: Sigan siendo felices...
La sábado que viene comenzamos la segunda vuelta, allí nos vemos.
