El Infantil B no supo adaptarse a las circunstancias, dejando para la última jornada la clasificación definitiva.
Disputamos este sábado el penúltimo partido de la liga contra el Atlético Madrileño, rival directo con el que estamos disputando la cuarta plaza de la clasificación.
Avisados estábamos del potencial de este rival directo, que fue capaz de llevarse un punto del Alberto Ruiz en la primera vuelta de la liga. Un equipo muy equilibrado en sus líneas habituado a jugar en un campo de pequeñas dimensiones al que el Infantil B no supo adaptarse.
No obstante y gracias a las tareas bien hechas en los últimos encuentros, afrontábamos el choque con un colchón de cuatro puntos que nos hace depender de nosotros mismos en la última jornada, donde disputaremos los tres últimos puntos contra el SPORTING SEIS DE DICIEMBRE "B", situado en la novena posición que viene de vencer en esta jornada y que puede mejorar su posición si logra arrebatarnos esos tres últimos puntos en liza. Por su parte el Atlético Madrileño visita el campo del C.D. La Moraleja, donde tendrá difícil sacar un resultado positivo. Pero esta posibilidad no hemos de contemplarla ya que dependemos de nuestra victoria, objetivo que debemos de conseguir y cerrar la liga, en nuestro campo, en esa tan luchada cuarta posición. No podía ser de otra manera, nuestro Infantil B no da tregua a su afición y hará que la expectación esté a flor de piel en ese último encuentro. Somos, para bien o para mal un equipo de últimos minutos y por ende de última jornada.
En cuanto al partido de este sábado redundar que el Infantil B no supo adaptarse al juego que hay que desarrollar en un campo con dimensiones pequeñas contra un equipo bien plantado y que disputó todo el encuentro a un gran nivel.
Comenzamos el encuentro luchando ambos equipos por cada balón en un breve espacio de juego, lo que parecía en ocasiones algo parecido al partido en un patio de colegio. Pese a ello, el Infantil trataba de realizar su juego aprovechando a la velocidad de nuestros extremos cada vez que se encontraba algún hueco en la defensa rival. Se desarrollaba el juego sin control claro por ningún equipo, con bastantes y continuas pérdidas de balón y sin ocasiones claras a no ser con oportunidades a balón parado.
Así en una jugada donde el rival se aprovechó de un balón que su extremo derecho se llevó con la mano, sin ser sancionada por el árbitro, el Atlético Madrileño cobró ventaja en el marcador mediada la primera parte. Ante esta contingencia el Infantil tomó las riendas del encuentro sabedores de que eran capaces de dar la vuelta al marcador. Así desarrollaron los mejores minutos del encuentro logrando el empate con un gran remate de cabeza de David en un saque de esquina lanzado por Arroyo.
Con el empate finalizaba la primera parte, comenzando la segunda con el mismo ímpetu. Fruto del mismo, aunque sin desplegar el juego que llevan en sus botas, el propio David puso el marcador en franquicia marcando el segundo gol en su cuenta particular.
Parecía entonces que el Infantil había hecho la parte más difícil, dar la vuelta al marcador. Tras el gol Edu realizó el único cambio del nuestro equipo dando salida a Bombi por Cesar y con el mismo la variación de posición en el campo de varios jugadores.
En esta ocasión le tocaba al Atlético Madrileño dar la vuelta al marcador, comenzando por transformar un penalti que David estuvo a punto de detener. El Colmenar no aprovechaba sus oportunidades, sobre todo los innumerables saques de esquina de los que dispusimos perdiendo el control del juego en el medio del campo. Los jugadores perdieron en numerosas ocasiones sus posiciones en el terreno de juego, lo que no hacía más que dificultar el control del ritmo del partido, convirtiéndose el mismo en un correcalles de área a área donde los más listos fueron los jugadores del Atlético, aprovechando en el minuto setenta un balón dividido entre nuestros centrales.
Aunque el Infantil lo intentó hasta el pitido final no supo aprovechar sus cualidades y traerse un buen resultado para el Alberto Ruiz.
Además tras el pitido final algunos de nuestro chavales no supieron encajar la derrota dando lugar a un incidente desagradable con la afición rival. En el fútbol a veces se gana, casi siempre se pierde pero las formas, la deportividad y la educación nunca deben de dejar de acompañar a nuestro equipo y con ello a nuestro club y a nuestro pueblo.
¡ AUPA AGRUPA !
Un cordial saludo a todos los jugadores, entrenadores y familias de este Infantil B.
