Guapo Fuerte Y Formal

Juvenil A


16/03/2015
Guapo, fuerte y formal

JUVENIL A - C.D. Leganes S.A.D. C


Resultado: 3 - 0

Fecha: 14/03/2015

Hora: 18:00

Estadio: Colmenar Viejo - Alberto Ruiz (Ha)

El Juvenil A logra una sólida victoria frente a un rival directo como el Leganés “C” en un partido que supo interpretar perfectamente en todas sus fases.

No se en cuántas ocasiones a lo largo de la temporada y media que llevo escribiéndoles estas crónicas habré empezado diciendo “No es fácil escribir una crónica como la de este partido”. Creo que ha ocurrido en más de una ocasión, pese a los intentos del tándem dedos-cerebro por tratar de elevar acaso un peldañito el nivel en cada nueva entrega de esta historia.

Y en esta ocasión es complicado no empezar así porque hay tantas cosas que no quiero que se queden fuera que, sin ser miedo, si hacen sentir una especie de runrún que ríase usted del Bernabéu al ver a Huntelaar pisar área. Empezaré por algunos de ustedes, los que pasan frio en la grada tantas tardes de invierno mientras ven a este grupo de futbolistas jugar o entrenar, que respondieron a la sorda llamada de un partido que tenía mucha miga y contribuyeron, junto a un buen puñado de amigos de los protagonistas, a crear un magnífico ambiente pese al frío que prometía la tarde de este 15 de Marzo de 2014. Y continuaré por todos los componentes de otros equipos o del organigrama de nuestro club que cambiaron una tarde con partidos de Atlético y Barcelona por una velada con los Juveniles franjirrojos como atracción principal.

Y llego a ellos. A los que supieron manejar cada elemento del encuentro como la ocasión no solo merecía, sino que requería. Y que pese a una primera parte que no fue brillante, mantuvieron sus fichas (las de jugar, no las otras) sobre la mesa sin temblarles el pulso. El viento se convirtió en el invitado sorpresa del partido condicionando en gran medida el juego colmenareño durante esta primera parte, especialmente en la faceta ofensiva. Dada la práctica imposibilidad de realizar ningún saque en largo, el equipo local se vió sometido a una especie de examen sorpresa sobre el juego en corto, de esos que solo sacan adelante los alumnos aplicados de verdad. Tal es el caso de la defensa titular de esta ocasión, en la que repetían “los Pablos”-Botey y Arroyo- como laterales y Adrien acompañado en esta ocasión por Portillo en la zona central. Ellos cuatro, junto a la ayuda de los centrocampistas Gil, Ivan y Diego fueron superando las dudas iniciales para ir de menos a mas frente a la presión que oponía el conjunto pepinero, un Leganés trabajadísimo que no dudaba en lanzar sus zarpazos hacia la portería de Uge siempre que había ocasión de ello. Mientras, el Colmenar no terminaba de mostrar todos sus argumentos al llegar a la zona de tres cuartos, pese a la voluntariedad de Forcano y Alex Ventura, con Monir oxigenando al equipo cada vez que el balón pasaba por sus pies. De Monir precisamente fue la primera ocasión clara para el equipo anfitrión tras una combinación por la derecha que hizo a los espectadores levantarse del asiento por primera vez en el choque. Y poco antes del descanso llegaría el primer gol de los serranos. En la primera ocasión en que el balón circuló con fluidez allá donde se cruzan los caminos, Alex Ventura comenzaba su particular video de highlights al poner un bellísimo balón al segundo palo, un pase que acaso por lo desapacible de la tarde hubiera parecido imposible de llegar. Pero cuéntenle ustedes eso a Forcano, pichichi y Coronel de Infanteria franjirrojo, quien apareció al segundo palo para poner el 1-0 del partido, posiblemente en el momento más oportuno viendo como crecía el Leganés con el balón en su poder. Corría el minuto 41, y en el 42 el Leganés sufría la expulsión de uno de sus jugadores, obligando a los del Sur a variar su planteamiento en esta trepidante visita al norte en el inmediato descanso.

Tras la pausa, el equipo visitante trató de subir su nivel de revoluciones ofensivas para evitar que el encuentro pudiera romperse en contra de sus intereses, pero sin embargo no habían pasado cinco minutos cuanto llegó la jugada que terminó de poner el partido en franquicia para el Juvenil A de la Agrupación. Una tremenda, por intensa y oportuna, presión de Pablo Botey acabó suponiendo un robo de Alex Gil, quien combinó rápidamente para Monir, quien detuvo el tiempo en la zona menos propicia para ello, justo en la frontal del área, esperando la incorporación de Forcano quien aparecia por la derecha del ataque pidiendo pista para poner el balón al segundo palo donde Alex Ventura ponía el 2-0 y esa sonrisa de complicidad que canta Loquillo en la canción homenajeada en el titular de esta crónica. El gol no solo aportaba mayor distancia en el marcador sino que obligaba al conjunto visitante a tratar de abrirse aún mas sobre el césped en pos de recortar distancias, por lo que se intuía, como asi fue, un goteo de ocasiones de gol para la franja colmenareña. Además, el banquillo local fue moviéndose, primero Leles se incorporó al terreno de juego para demostrar que la sangre y magia brasileñas no están reñidos con el rigor táctico (me pongo en pie para recordar a ese míto llamado Mauro Silva) sino que se complementan maravillosamente, seguido por Kike, al que por una vez no le tocó ponerse la capa de superhéroe, un Lillo que se mostró incisivo durante los minutos que participó y Chicho que tras quince días de paréntesis volvía al equipo tratando de recuperar sensaciones carvajalianas. El Colmenar vivía momentos felices, que no plácidos por un formidable rival que no lo permitió en ningún momento hasta los tres pitidos finales, sobre el césped del Alberto Ruiz.

El fútbol está hecho de momentos, buenos y malos, como la vida misma. Y por eso he reservado el penúltimo párrafo para el tercer gol, el segundo de Alex Ventura. Porque el fútbol tiene momentos mágicos, pero también, con perdón, tiene momentos muy cabrones. Y en estos últimos hay que saber aguantar el chaparrón y trabajar y trabajar y seguir trabajando desoyendo esas vocecillas que te dicen “dejalo, que en verdad no te renta”. Hasta que de repente un día, una jugada, te das cuenta que todo ha quedado atrás. Y que por mil vueltas tácticas, de preparación física, estratégica o psicológica, de repente Uge saca un balón con la mejor volea del mundo, y el Dios del fútbol da un empujoncito en forma de beso de aire convirtiéndolo en casi imposible de defender. Y tu amigo el balón, ese al que das mil toques en cada paréntesis de un entrenamiento, ese con el que bailas distrayendo a tus compañeros o a los ayudantes del mister para intentar hacerles una porra cuando menos se lo esperan, está contigo en una situación inmejorable de gol.

Y con un toque sutil por encima del guardameta rival, todas esas dudas, todos esos sacrificios, todo ese esfuerzo que nadie ve que tiene el fútbol, se queda atrás por un gol que te lleva a un abrazo con tu familia, y amigos y compañeros. Y después de eso no te duermes en los laureles buscando el hat trick, sino que eres capaz de bajar 80 metros al sprint en el minuto 89 para ayudar a tu equipo a defender.

Asi es como el Juvenil A se ha convertido en un equipo, trabajando juntos en los momentos duros, completando semanas de trabajo excepcionales como esta que ha coronado este partido. Un equipo en el que los jugadores, los técnicos y los que les arropan en la grada pueden decirte con toda la credibilidad del mundo “no vine aquí para hacer amigos, pero sabes que siempre puedes contar conmigo”.

Un equipo guapo, fuerte y formal.

Jugaron: Uge, Pablo Arroyo (Chicho), Botey (Kike), Portillo, Adrien, Ivan (Edu Leles), Diego, Gil, Alex Ventura, Carlos Forcano (Lillo), Monir y Dani. Con Jose Jerez en la grada junto a un buen puñado de amigos y familiares a los que estamos muy agradecidos.

Y especialmente a Amada Del Castillo por las geniales fotografías que acompañan esta crónica.

CARGANDO... POR FAVOR ESPERE