Impresionante esfuerzo de los jugadores del Infantil A, que con un jugador menos desde el minuto 5 de partido, a pesar de la derrota, consiguió el objetivo de esta temporada: la permanencia en División Autonómica Infantil
Partido en la cumbre donde se enfrentaban el Colmenar Viejo y el San Sebastián de los Reyes, separados tan solo por un punto entre ellos, y con un objetivo claro para ambos que era ganar el partido para conseguir matemáticamente la salvación y el poder militar el año que viene en una categoría tan bonita como ésta.
El partido empezaba con los dos equipos avisando del potencial de cada uno con varios acercamientos peligrosos en los primeros minutos. La jugada que iba a cambiar el partido definitivamente vino en el minuto 5 de partido, donde un contraataque bien hecho por los delanteros del Sanse, cogía desprevenida a la defensa del Colmenar y nuestro portero Pablo salió fuera del área como un defensa más e hizo una falta al delantero del Sanse, al cual derribó claramente evitando que avanzase hacía la portería. El árbitro sin dudarlo le sacó la tarjeta roja, convirtiendo el partido para el Colmenar en un infierno, ya que no disponíamos de portero suplente.
Un quebradero de cabeza para todo el equipo. Sin portero y con un jugador menos con 65 minutos restantes que quedaban de partido. Abel, nuestro central en ese momento, se puso de portero haciendo una magnífica actuación durante todo el partido.
Ésta expulsión fue como una inyección de adrenalina para nuestros jugadores que no dejaron de luchar en ningún momento y jugaron como si tuvieran 11 jugadores en el campo. Llegadas continuas a la portería rival con ocasiones muy muy claras de Iñigo, Isma, Rober en lanzamiento de falta directa y Javi Berrocal en un tiro fuerte que el portero rechazó estrellando el balón en el larguero. El Sanse como era normal, también tuvo ocasiones y acercamientos peligrosos que no supieron materializar.
Todo parecía indicar que nos íbamos a ir al descanso con 0-0, pero en la última jugada del primer tiempo, en el descuento de éste, el jugador número 10 del Sanse hizo una buena jugada individual, regateando a varios jugadores colmenareños y poniendo el primer tanto del partido justo unos segundos antes de coger el camino a los vestuarios.
Esto fue un mazazo muy duro para los jugadores, que caminaban a los vestuarios entre lágrimas sintiendo una gran impotencia al haber hecho un impresionante esfuerzo con un jugador menos y haber encajado un gol en el último segundo del primer tiempo, además de tener que aguantar una actuación del árbitro bastante mediocre.
En el vestuario hablamos de no bajar los brazos, de que este equipo tenía que morir luchando y que un 1-0 no significaba nada. Estábamos dentro del partido a pesar de ir perdiendo y tener un jugador menos.
El equipo salió un poco desordenado los primeros minutos del segundo tiempo y en un contraataque en el minuto 40 de partido, el Sanse hizo el 2-0 poniendo muy difícil el poder remontar.
Para los jugadores del Colmenar este gol no significó nada, pues siguieron luchando como leones, e incluso perdiendo 2-0 y con uno menos, tuvieron el control del partido toda la segunda parte, creando ocasiones claras de Iñigo, Berrocal y Quintana. Finalmente esta lucha tuvo su recompensa. En una jugada magnífica de Iñigo controlando un balón dentro del área, regateó a dos contrarios y el segundo le propinó una buena patada haciendo penalti a favor de los de Colmenar, a falta de 4 minutos para el final del partido. Molina lanzó el penalti a la perfección mandando el balón a la red en un tiro cruzado. 4 minutos de infarto, en los que el equipo tuvo la iniciativa e hizo que el Sanse terminase el partido pidiendo la hora.
Los jugadores terminaron el partido derrotados de cansancio debido al intenso esfuerzo que hicieron. Como recompensa a este esfuerzo, en el autobús de camino a Colmenar, nos enteramos que nuestros rivales más cercanos habían perdido sus partidos, lo que nos daba la permanencia matemática en la categoría.
Orgulloso de estos jugadores que no bajaron los brazos a pesar de las dificultades y que siguieron luchando hasta acabar fundidos de cansancio y obtener el objetivo final de la temporada.
Enhorabuena a los 20 componentes de la plantilla del Infantil A por haber conseguido el objetivo en una temporada muy bonita y muy difícil para todos. Ahora a disfrutar del último partido en casa ante el Torrelodones y despedirnos de nuestra afición, padres y amigos que han estado a nuestro lado durante todo el año. GRACIAS A TODOS.
